En los más de 10 años que llevo lanzando proyectos digitales he invertido miles de euros y centenares de horas a ideas que se han estrellado estrepitosamente.
No importa la experiencia o los éxitos que acumules a tus espaldas. Hasta la mejor idea de negocio puede fracasar.
En esta newsletter te voy a revelar los tres métodos que uso para evitar que me vuelva a ocurrir.
De la comunidad
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En 2001, Segway lanzó su nuevo vehÃculo de transporte personal —una plataforma con dos ruedas y tecnologÃa de autoequilibrio de última generación.
Steve Jobs vaticinó que las ciudades se construirÃan alrededor de esta nueva forma de transporte, y John Doerr, uno de los inversores más ricos del mundo, predijo que las ventas alcanzarÃan los 100.000 millones de euros.
Segway tenÃa previsto vender 50.000 unidades en el primer año.
Dos años más tarde, apenas habÃa vendido 6.000. En 2020 cancelaron su producción.
La idea de Segway era buena. Pero no era lo que la gente querÃa.
Identificar una idea para tu proyecto no es suficiente. Si no la validas antes, corres el riesgo de terminar tirando mucho tiempo y dinero.
Por esto se popularizó el producto mÃnimo viable (MVP).
Se trata de lanzar una versión preliminar de tu producto o servicio para comprobar si existe interés lo más rápido posible.
Pero al final, por muy preliminar que sea, requiere trabajo y dinero. Y sigue siendo lento.
No necesitas un MVP. Estos tres métodos te permitirán validar tus ideas sin ni siquiera crear una versión inicial.
1. Simula el proceso de compra
Hay quien sigue recomendando preguntar a potenciales clientes si estarÃan interesados.
No preguntes a nadie si te comprarÃa. La mayorÃa te dirá que sà para quedar bien.
La única validación que importa es cuando la gente saca la tarjeta y se gasta dinero.
Y esto es lo que vas a simular con este sistema.
Crea una página de ventas para tu producto o servicio y haz una campaña de Meta o Google Ads para promocionarla.
Incluye un botón de compra. Como todavÃa no tienes nada que vender, déjalo desactivado. Ningún problema.
Asegúrate de poder monitorizar los clics en ese botón —puedes usar Google Analytics o alternativas simples como Hotjar.
Cuando finalice tu campaña, analiza la intención real de compra comprobando qué porcentaje de usuarios han clicado el botón.
Si apenas tiene clics, descarta la idea y ve a por otra.
2. Ofrece tu servicio en Fiverr
Puedes usar una plataforma con millones de clientes potenciales como Fiverr para validar rápidamente una idea de servicio.
Pon un precio más competitivo para compensar la falta de reseñas y limitaciones de marketing de la plataforma.
Si no consigues ventas, busca otra idea.
Si las consigues, idea validada 😀 Aprovecha el feedback de los clientes para terminar de ajustar tu servicio final.
3. Prevende a tu audiencia
Si tienes una lista de suscriptores, puedes presentarles tu propuesta y prevender el producto con un descuento.
Deja claro que todavÃa lo estás creando. AsÃ, si descubres que no hay suficientes compradores, tan solo tienes que reembolsar el importe y listos.
Esto es lo que hice con un segmento de mi lista hace un par de meses para descartar rápidamente una idea de infoproducto.
Mejor saberlo antes de trabajar en algo destinado al fracaso.
Si hay suficiente interés, no olvides pedir feedback a tus compradores para que te ayuden a ajustar el producto a sus necesidades mientras lo construyes.
Vivimos en una sobreoferta de ofertas.
Los lanzamientos cada vez son más complicados, y ya no tiene sentido dedicar tiempo y dinero en crear algo sin la certeza de que la gente lo quiere.
Testea rápido tus ideas. Quédate con las que prometen y descarta aquellas destinadas a fracasar.
Este pequeño esfuerzo ahora te puede ahorrar centenares de horas y euros después.
Hasta la semana que viene,
Pau